El hecho de poder creer, de poder esperar una caricia, no me convierte en ingenua, sólo tengo la seguridad de que la vida me regalará cosas gratas, en las cuales podré dar todo de mi, siendo tal cual soy.
No tengo la necesidad de obligar a mi rostro, a sonreír si no lo siente mi corazón. Tampoco necesito el cariño de aquellos que van por la vida dando para obtener beneficios propios, hay tanta gente marvillosa que sabe valorar que no quiero perder mi tiempo en aguantar a personas caretas que no dejan huellas.
Peco por ámame., y saber amar, y bienaventurada soy por animarme a hacerlo.
No me arrepiento de nada, porque no hago las cosas sin incluir mis sentimientos en todo lo que hago.
Sé dejar mis pisadas, se querer y respetar, se cuidar lo mas valioso y rechazar lo que no construye a mi amor.He aprendido que en ésta vida esta lleno de seres egoístas, que si bien , tengo que cruzarlos no quiero que caminen a mi lado, he aprendido a cuidarme, a quererme, y a darme mi lugar, el lugar que he ganado, luchando contra la tristezas, brillando en mis noches oscuras, disfrutando del sol, que brilla fuerte muchas veces detrás de nubes.
Creo, apuesto, y lo voy a seguir haciendo, porque hay mucho por recorrer, mucho por encontrar, y en ésta vida, tengo una misión y es dar mi amor.
Soy simplemente una mujer, que sabe dar , sin esperar nada a cambio.Pero también sabe elegir, y no pienso quedarme con personas que no saben mirar, sonreír, por el sólo hecho de gratificar sus días al hacerlo.
El amor es .... No se hace.
Y mi amor, es de todos aquellos que saben mirarme.....
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